Pese que en Tamaulipas opero una elección de estado, al fin de cuentas se impuso la voluntad popular y AMÉRICO VILLARREAL ANAYA recibió su constancia de Gobernador Electo.
Fue suficiente con que salieran a votar poco más del 50 por ciento de los electores para que se conjurara lo de lacompra de votos y la generación de un clima de temor a fin de que los ciudadanos no acudieran a las urnas.
Al fin de cuentas la diferencia fue de más de 100 mil votos a favor de VILLARREAL ANAYA sobre su más cercanocompetidor, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS.
El añadido, como bien se documenta, es que AMÉRICO se convirtió en el más votado de los candidatos al ejecutivo estatal en la historia de la entidad.
Vale decir que pese a los sesgos que en su momento tuvieron los Institutos Electoral de Tamaulipas (IETAM) y Nacional Electoral (INE), terminaron por cumplir con su función.
Sucede que durante el proceso las autoridades electorales fueron complacientes con los partidos de la alianza Va por Tamaulipas y el propio Gobernador, FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, mismo que prácticamente se convirtió en el jefe de campaña de su candidato.
Sin embargo, el IETAM y el INE, durante la jornada electoral y posterior a ésta mostraron un comportamiento apegado a derecho.
Y esto se los facilitó la marcada diferencia en el numero de votos que obtuvo VILLARREAL ANAYA; de lo contrario quizá se habría escrito una historia diferente o al menos la elección pudo complicarse.
A propósito, desde el Partido Acción Nacional (PAN) y en voz del “gerente”, LUIS CANTÚ GALVÁN, insisten en echar abajo el resultado de la elección con el argumento de que hubo irregularidades.
Para reiterar esa intención llamaron a una rueda de prensa en el que estuvo el candidato, CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS y el ex consejero del INE, MARCO ANTONIO BAÑOS, en calidad de asesor electoral y defensor de la causa panista.
Se nota que VERÁSTEGUI OSTOS acudió para cubrir las formas porque tiene claridad que la lucha esta perdida. Quizá por eso reiteró en su discurso que respetará la determinación de las autoridades.
Da la impresión de que para él lo mejor sería reconocer que se perdió y desear que le vaya bien al Gobernador Electo.
Pero alguien, que suponemos es el todavía jefe político del albiceleste, prefiere que su partido acuda a las instancias jurisdiccionales para tratar de justificar la derrota.
Más si se considera que hubo voces que hablaban de que la elección estaba arreglada.
Desde luego que eso no fue así, al grado de que la guerra sucia estuvo al extremo y ni que decir de las persecuciones políticas en contra de dirigentes de Morena, Alcaldes y hasta integrantes de la familia de VILLARREAL ANAYA.
El propio día de la jornada electoral se vio el operativo para la compra del voto, la utilización de la policía estatal para detener a opositores e infundir temor a los votantes, aunado a la presión que se ejerció en contra de los empleados de las dependencias estatales con el objetivo de que votaran por el abanderado de la coalición Va por Tamaulipas.
Dura derrota y lección le acaban de propinar los electores al mandatario GARCÍA CABEZA DE VACA.
Lo que vendrá, más temprano que tarde, es desmantelar el aparato creado para perseguir y detener a opositores, además de regresar al Congreso tamaulipeco a la condición dada por los votantes, de tener una conformación de mayoría morenista.
En cuanto al Gobernador y no pocos funcionarios, es de esperar que su carrera política siga a la baja y, en algunos casos, lo más probable es que tengan que rendir cuentas ante la justicia.
Recordemos que el caso GARCÍA CABEZA DE VACA viene de tiempo atrás y enfrenta tres posibles delitos: defraudación fiscal, operación con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada.
Los días por venir serán plenos de acontecimientos y Tamaulipas continuará en la ola informativa. Confiamos en que, ahora, será para bien.
RULETA
Hasta los propios conductores y periodistas que hacen causa común con los integrantes de la alianza opositora “Va por México” consideran que ésta es un verdadero fracaso.
El grave problema de los dirigentes de los partidos, PAN, PRI y PRD, entiéndase MARKO CORTÉS MENDOZA, ALEJANDRO MORENO CÁRDENAS y JESÚS ZAMBRANO GRIJALBA, en forma respectiva, es que adoptan una ceguera y sordera voluntaria ante la realidad.
Si fuera de otra forma y tuvieran conciencia y altura de miras, desde tiempo atrás tendrían que haber aceptar que su actuación y estar coaligados los esta llevando al fracaso.
Es evidente que su estrategia en calidad de adversarios es errática y perdedora, según lo que arrojan los resultados de los recientes comicios y el nivel de aprobación ciudadana que tienen en contraparte a la que le otorgan a Morena e institutos afines y, principalmente, al Presidente de la República, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Les haría bien a los opositores cambiarsi en verdad quieren estar prestables para la elección del año próximo, en la que estarán en juego dos gubernaturas y, principalmente, en los comicios del 2024 en que se diputará la Presidencia de la República y la integración de las cámaras de Diputados y Senadores entre otros cargos de elección popular.
Ya LÓPEZ OBRADOR les advirtió que de seguir por el mismo rumbo solo cosecharán derrotas.
AL CIERRE
Acuden dirigentes de Morena y gobernadores electos, entre ellos AMERICO VILLARREAL ANAYA, a una reunión con el dirigente nacional, MARIO DELGADO CARRILLO.
El evento se llevó a cabo en Toluca, Estado de México, y en el estuvieron presentes la Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, CLAUDIA SHEINBAUM al igual que el Secretario de Gobernación, ADAN AUGUSTO LÓPEZ.
Se palapa que los morenistas quieren esparcir su actitud de triunfo en una plaza que pueden ganar en las elecciones del 2023 y se aprovecha en escenario para continuar placeando a los presidenciables.