El representante de Morena en Tamaulipas, diputado federal Mario Rafael Llergo Latournerie, es un cuadro de confianza del círculo cercano al primer morenista del país, lo cual es síntoma del interés que la cúpula tiene por obtener en la elección federal 2024 los triunfos que aseguren llevar a feliz término el “Plan C” de Andrés Manuel López Obrador, que no es otra cosa que obtener el carro completo en las dos cámaras del Congreso de la Unión.
Llergo representa al 6º distrito de Tabasco, el paisano de AMLO viene como delegado del Comité Ejecutivo Nacional, a asegurar que se realice un trabajo político que derive en obtener triunfos en las urnas para su partido. El principio de una historia de éxito empieza con la selección de candidatos y en eso se estarán ocupando la dirigencia estatal que encabeza Yuriria Yturbe y el flamante delegado del CEN, todo dentro de la pauta que marca el calendario electoral.
La marca, el peso de cada candidato de cara a la sociedad, así como la operación política que lleve a cabo el partido, definirá los resultados que se obtengan el próximo 2 de junio. Y esto es para todos los partidos.
La gestión casi “fantasmal” de Yuriria Yturbe Vázquez al frente de Morena desde hace un año 5 meses tiene muy tranquila a la oposición, que percibe un decrecimiento en las preferencias por el partido guinda, es decir que no será suficiente las siglas partidistas, ni absoluto el resultado que pueda acarrear la popularidad del presidente que también ha disminuido.
La realidad es que esta será una elección con un alto nivel de competencia, donde las dos coaliciones (Morena-PT-PVEM Y PAN-PRI-PRD) tendrán que sacar sus mejores cuadros y echar mano de operadores experimentados, es mucho lo que está en juego para los que están en el poder, desde el acompañamiento de un congreso local identificado con el Ejecutivo de Tamaulipas, hasta un Congreso de la Unión afín al Presidente, o en ambos casos una oposición que sea un real contrapeso en esos dos niveles de gobierno, esa decisión está en manos del electorado.
Politólogos experimentados consideran que para ganar esta elección a Morena debe de salir a votar poco más del 60 por ciento del electorado, si reina la apatía las oportunidades de triunfo de la “Alianza va por México” serán menores. Sin embargo no hay un triunfo absoluto para la coalición de “Juntos haremos historia”, aunque las leyendas urbanas habían venido tejiendo historias de éxito rotundo para Morena. La última palabra se escribirá hasta el último minuto de la jornada electoral del 2 de junio.
EN EL OLVIDO EL DESPLOME DE LA IGLESIA DE MADERO.- Es obvio que no hay interés por dictar una postura o resolución en el caso del derrumbe de la iglesia de la Santa Cruz de Cd. Madero donde murieron 12 personas luego de que la loza se desplomó hace casi tres meses. Es tiempo suficiente para haber emitido algún criterio, el diagnóstico se entiende que ya fue elaborado y el dictamen es de una falla estructural, es decir que se cuarteó y rompió una estructura de concreto. Eso en pocas palabras nos dice que los cálculos del material utilizado estuvieron mal hechos.
El edificio tiene 60 años de haberse construido, es difícil localizar a los que llevaron a cabo la edificación, nos referimos a la mano de obra ocupada, porque obviamente nadie patrocina una edificación que represente un riesgo, por seguridad propia, por el interés que representa la institución frente a una feligresía, y por muchas razones.
De tal manera que delimitar responsabilidades de quienes ejecutaron la obra, no serviría de nada, lo más probable es que ya no están en este mundo o quizá tengan alrededor de 90 años de edad.
Pero hay otros culpables en el servicio público, los que debieran de supervisar que cualquier obra se realice bajo la responsabilidad de un constructor debidamente acreditado.
Sabemos que en muchos de los casos son los llamados “maestros” de obra, que es un albañil que se supone tiene experiencia, el que realiza los cálculos de los insumos utilizados.
La muerte de estas 12 personas debiera de ser motivo suficiente como para revisar los procedimientos, las leyes en materia y ver de qué manera puede llevarse a cabo una mayor vigilancia para evitar desgracias como la de la iglesia de la Santa Cruz.
El tema no es buscar culpables en esta triste historia, sino soluciones y propuestas para que no se repitan otras desgracias.