La nueva orden de aprehensión que un Juez de Distrito obsequió en contra de Francisco Javier García Cabeza de Vaca por su (probable) participación en ilícitos de delincuencia organizada, esta vez sí podría ejecutarse porque ya no cuenta con fuero.
En la víspera el Instituto Nacional de Migración (INM) emitió una alerta para evitar su fuga, mediante el comunicado 543/22, bajo los conceptos de: verificar, registrar e informar a las autoridades respectivas, sobre todos sus movimientos de ingreso-salida en los puntos de tránsito internacional.
Esto, a petición de la Fiscalía General de la República (FGR).
Los principales cargos por los que se le investiga, son:
a) Lavado de dinero;
b) Asociación delictuosa; y
c) Defraudación fiscal.
Pero conforme avance la investigación, podrían fincársele otros delitos como peculado, cohecho, desvío de recursos públicos, abuso de funciones, encubrimiento, tráfico de influencias, desacato y obstrucción de la justicia… al menos.
Él, desde la asunción presidencial de Andrés Manuel López Obrador el 1 de septiembre de 2018, supo que el tabasqueño no le perdonaría (nunca) sus mañosas embestidas, ordenadas por los dueños de su dehesa: Vicente Fox Quesada y Felipe de Jesús Calderón Hinojosa.
Así que, en lugar de dialogar, buscar acuerdos o concertar una relación de respeto mutuo con el presidente dedicó su tiempo a lo que más se le da: la pendencia, pese a tener en contra la comisión de un mar de fechorías en la administración pública. Municipal y estatal.
Ahora se dice víctima de una persecución política.
Pero lo cierto, es que ya huele a barbacoa.
Dice ‘Pancho’ en su cuenta twitter que no ha huido del país y radica en su rancho (sito en Tamaulipas) –¿cuál de todos?–, mientras sus abogados preparan su defensa.
Lo cierto es que, en la entidad, nadie lo ha visto, desde semanas antes de concluir su mandato (30 de septiembre próximo pasado), y, si no acudió a la toma de posesión de su sucesor, fue porque los diputados (locales) del Partido Acción Nacional (PAN), impuestos por él, no lo invitaron, o simple y llanamente evitó correr el riesgo de que ahí mismo lo arrestaran.
A lo largo de los cuatro últimos años se cantó el futuro de Paco García Cabeza de Vaca.
Así que no extrañaría que en cualquier momento le echaran ‘el guante’ para llevarlo al cadalso.
Sobre todo, cuando la FGR cuenta con una investigación profunda con relación a sus ilícitos, pero no pudo ejecutar la orden de aprehensión –que también le obsequió un juez federal–, al ésta ser invalidada por la Suprema Corte Justicia de la Nación (STJN) en automático, tras reconocerle su fuero constitucional.
En fin, los pronósticos indican que su captura está más que anunciada para hacerlo pagar el daño profundo que le hizo a Tamaulipas.
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