La muerte de dos mujeres, que asaltó la tranquilidad victorense en las postrimerías del 2 mil 21, en voz del Fiscal IRVING BARRIOS, quedó aclarada y despejadas las zozobras que a raíz de aquello, andaban animando terceros.
En el caso de la señora NENA LAVIN MONTEMAYOR, el avance de las indagatorias, con dos de los presuntos responsables detenidos, precisa que no se trató de la delincuencia organizada, sino de un grupo espontáneo, que se unió para cometer el delito.
Las huellas de los dos detenidos fueron identificadas en el domicilio, como en el vehículo de la víctima, en el que fue sacada de su domicilio y que se había llevado el victimario conductor.
Sería la primera ocasión que cometían un delito de esa naturaleza, porque, aunque los procesados cuentan con antecedentes penales, estos se refieren a delitos menores, como riñas y hurtos de baja monta.
Hasta ahora están identificados cinco participantes, pero las investigaciones no se han cerrado y eventualmente responderán a las preguntas sobre cómo entraron al domicilio de la víctima sin alterar las cerraduras.
Pudieron haber utilizado el factor sorpresa, pero no es algo que ya esté plenamente configurado; la otra hipótesis es que hubieran tenido alguna complicidad, o actuado de manera concertada con “alguien de dentro”.
Al cierre de la conferencia de prensa, que dio acompañado del Secretario de Seguridad Pública, para dar los avances del caso, el Fiscal dedicó unas pocas palabras para señalar que el caso de la doctora MARIA DEL CARMEN CRUZ también está plenamente esclarecido.
Ya sabe, la profesionista que el 28 de diciembre desapareció en lo alto de la sierra madre, a donde acostumbraba ir a hacer ejercicio, y hasta una semana después el cuerpo fue encontrado sin vida, en las inmediaciones de donde había dejado su vehículo.
Con un escueto “no se configuró delito qué perseguir” y la explicación de que no daría más detalles para no revictimizar a la dama, dio por cerrado y archivado el caso, como totalmente concluido.
Las versiones extraoficiales hablan de patologías psicosomáticas, asociadas a la depresión que habrían desembocado en suicidio.
El hecho es que los dos casos que en efecto causaron intranquilidad en el centro del Estado, aparecen ya como esclarecidos y, en el que procede, en vías de someter al imperio de la ley a los responsables.
Tal eventualidad, por un lado, reivindica el compromiso hecho por el gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, de que no se permitirá la impunidad en su administración, y por el otro, pone en su lugar a quienes estaban usando la tragedia ajena como instrumento de promoción política.
Las vísperas, el comité del PAN hizo difundir un boletín, en el que legisladores locales y federales se quejaban de “la ola de violencia” y exigían al gobernador presentar a los detenidos.
Igual una exfuncionaria de educación, cercana al exgobernador y protagonista de escándalos en su tiempo, hizo reclamos y condenas públicas a través de redes sociales, pretendiéndose cabeza de un “movimiento por la seguridad de los deportistas”.
En general, cuadros dirigentes y personajes del panismo, desde antes de dejar el poder hicieron todo lo que pudieron para que se descompusiera el estado, y han venido tomado los presuntos hechos delictivos para dibujar escenarios apocalípticos.
Lo cierto es que, con todo y sus trampas, la incidencia delictiva ha ido a la baja, desde que ellos dejaron el gobierno estatal y a diferencia de lo que ellos hicieron en su tiempo, ahora los hechos no se ocultan, siempre en un afán justiciero, sin más connotaciones.
Eso de desacreditar a la 4T con un estado incendiado, fue la última bandera perdida, con la que el PAN pretendía hacer proselitismo.
Lo de repetir estrategias torcidas de campañas negras y coacción al voto, que tampoco le funcionaron en la elección de gobernador el año pasado, era el otro frente en el que igual se les ha ido cerrando la llave.
Primero el multimillonario saqueo de la COMAPA Tampico, descubierto y abortado a tiempo, con la contrareforma legislativa abordada por la bancada morenista en el Congreso Local.
Y luego el asalto a la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia de la Universidad Autónoma de Tamaulipas, que no es un caso cerrado, pero igual está en vías de solucionarse, con los pelos de la burra en la mano.
En el Congreso Local, ayer hubo reunión de trabajo de la diputación permanente y citaron a otra para mañana, antes de que el domingo, concluya el receso e inicie el nuevo periodo ordinario de sesiones.
Para entonces, se esperan importantes sorpresas; entre ellas, la petición que formalizarán los diputados morenistas, de renuncia de los jueces federales FAUSTINO GUTIÉRREZ y JUAN FERNANDO ALVARADO, por el sospechoso manto de impunidad que han tendido sobre el exgobernador FRANCISCO GARCÍA.
El dominio de la bancada morenista en la permanente, con cuatro de los siete asientos de la representación popular en funciones, ha permitido limpiar la congeladora, a donde los panistas habían mandado muchas de sus iniciativas, así como el archivo muerto, con requerimientos a exfuncionarios, ahora prófugos.
La semana pasada fueron 48 iniciativas y ahora 27, incluida la revisión documental de los requisitos presentados por los 18 aspirantes que se registraron para la elección del nuevo Comisionado del Instituto de Transparencia y Acceso a la Información de Tamaulipas, ITAIT.
La reunión del jueves será precisamente para entrevistar a los aspirantes y dictaminar una terna, que será sometida a la votación del pleno para sacar el nombramiento, sin detrimento de otros temas que aparezcan en esa agenda.
Entre los prospectos van hasta el exsecretario y efímero magistrado del Tribunal Electoral LUIS ALBERTO SALEH, los exconsejeros del instituto electoral RAÚL ROBLES y NOHEMÍ ARGUELLO –esposa del excomisionado presidente- y el otro excomisionados presidente HUMBERTO RANGEL VALLEJO, de los primeros fletados con el PAN en el pasado sexenio, en su caso y tiempo, como diputado del Partido Verde.
De ese perfil, el controversial exgerente de la COMAPA Victoria, primer operador del prianismo y exsecretario del ayuntamiento, GUSTAVO RIVERA RODRÍGUEZ, también “se conforma” ahora como el megasueldo de Comisionado de Transparencia.
Arriba de 100 mil pesos de salario mensual a cualquiera impresiona; para ellos, es pecata minuta, luego de haber andando donde anduvieron, haciendo lo que hicieron.
Con su PAN se la seguirán comiendo.