Son dos frases que encierran la verdad cuando se forma parte de un equipo. Las decisiones no son unipersonales y a conveniencia.
A manera de réplica, Rodolfo González Valderrama resume a esta colaboración sobre su salida de la delegación de Programas Federales: “No me voy, me llevan”. La otra sintetiza su llegada hace cinco meses a Tamaulipas: “Yo no vine, me trajeron”. No dice más. No es necesario. Este martes fue su último día de labores al frente de la “superdelegación” tamaulipeca, entrega de bienes y recursos según protocolo. Por la noche regresaría a la gran capital en el medio de transporte que le gusta utilizar: Autobús de línea. Forma parte de un engranaje de la Cuarta Transformación, equipo que no es menor si se trata del gobierno federal. Si cada quien decidiera su destino político, esto sería una selva, una cena de negros. Bien dicen que, en política, nadie renuncia, lo renuncian, o aquella máxima de que al jefe nunca se le dice no, ni se le rechaza algún ofrecimiento administrativo o por elección, aunque sea menor y conlleve un sacrificio. Es la disciplina que cohesiona a los grupos y organizaciones para evitar el caos. Así cerramos comentarios de la colaboración anterior (“Rodolfo, hombre de poca fe”), centrados en el retiro de González Valderrama de la más importante representación federal en Tamaulipas. De que es un hombre congruente con pensamiento y obra, lo es. No cultiva soberbias, vanidades ni arrogancias. Buena suerte. En otros asuntos, mire usted la burla de que fue objeto la profesión de periodista en la sesión de martes del Congreso del Estado, al pretender el PAN crear la figura delictiva de “periodicidio” para aquellos que maten a un periodista. Burla porque quieren utilizar a los comunicadores como instrumento de ganancia política en periodo electoral, cosechar a río revuelto. La iniciativa fue de Linda Mireya González Zúñiga, quien por supuesto que no se manda sola, obedece a los jerarcas celestes. Contiene adiciones al Código Penal en el tema de delitos contra la libertad de expresión y derecho a la información. Define que “comete el delito de periodicidio quien prive de la vida una persona que ejerza la actividad del periodismo”. Es un plagio a iniciativas que han bailado en Congresos de otras entidades y la Asamblea Legislativa del ex DF, como forma de agresión a la competencia política, en lugar de dedicarse a exigir protección para los periodistas ¡en vida!. ¿Para qué pedir penas de 60 años de cárcel por el asesinato de un periodista? Lo que necesitamos es seguridad para el desempeño de la tarea informativa y derecho a disentir de los hombres del poder. Desafortunadamente, y esto se los tuvo que recordar la diputada Magaly Deandar Robinson, descendiente de familias de periodistas de Reynosa, lo que necesitan los comunicadores es defenderse del Estado, de funcionarios y corporaciones policiacas. En efecto, las agresiones vienen principalmente de alcaldes y gobernadores, convertidas en amenazas, difamaciones, “levantones” y guerra psicológica, en ocasiones en complicidad con grupos delictivos. El gran riesgo para el oficio es cuando se denuncia corrupción, complicidades e impunidad de funcionarios. Con el crimen organizado los medios guardan “distancia y respeto”. Lo de “periodicidio” es término acuñado ahí por 2017 por un asambleísta llamado Carlos Candelaria, quien pidió cárcel de hasta 60 años para los asesinos de comunicadores. Lo replicaron otros políticos de media cuchara. ¿El mejor periodista es un periodista muerto? Nadie quiere ser mártir. La exigencia está en las garantías para el ejercicio. El comunicador es humano como todos, de cuerpo y alma, no necesita más ¿derechos? y quiere ser medido con la misma vara que todos los ciudadanos. Dejamos el tema para comentar que la última encuesta de la empresa Mitofsky sobre la aprobación de los alcaldes de capitales estales, le confiere al victorense Eduardo Gattás Báez el nada despreciable lugar 14. El 48.8 por ciento de los consultados están de acuerdo con su actuación. Lleva cinco meses en su administración. Noticia también, pero de la encuestadora Massive Caller, el resultado de su investigación publicada este uno de marzo en que reitera que, de las seis entidades en que habrá comicios el cinco de junio, el PAN-PRI se enfoca a ganará dos y cuatro Morena-Pt-Verde. A saber por sus datos, es casi seguro que el celeste conserve Aguascalientes y, en sociedad con tricolores y amarillos, ganen Durango. Los guindas por su parte aventajan en Oaxaca, Hidalgo, Quintana Roo y Tamaulipas (Américo Villarreal Anaya) con amplio margen. Lamentable el fallecimiento del activista y luchador social Guillermo Gutiérrez Riestra, ligado desde la adolescencia al Partido Comunista Mexicano, Partido Revolucionario de los Trabajadores, PRD y finalmente Morena. Como nadie sufrió persecuciones del aparato de gobierno estatal y ayuntamiento de Victoria, la peor de ellas en la administración de Pascual Ruiz García, cuando lo movieron día y noche por diferentes bartolinas de la delegaciones policiacas. Fundó varias colonias en la mancha urbana para satisfacer necesidades de tierra de familias de escasos recursos y, en su última etapa como líder, encabezó la lucha por los desaparecidos.